En la mayoría de los casos, al menos en la última década, se ha tildado a las corrientes alternativas de pertenecer a un movimiento soso, vacuo y sin sustancia.
A pesar de que existen agrupaciones que demuestran lo contrario, como Perras on The Beach (la cual ya tuvimos el placer de reseñar con su último disco), todavía la sombra de ciertos estigmas prevalece hasta el sol de hoy.
No negaré que, quizá, algunas de estas premisas sean autoinfundadas, o que otras atinen a la realidad; pero, no debemos olvidar que en cuanto más prejuicios salgan a la luz, más contramareas a estos aparecerán a nivel artístico.
Tal es el perfecto ejemplo que nos trae Bubis Vayins, quienes a primera escucha resuenan como una soplo de menta: fresco y al punto.
¿Quiénes son Bubis Vayins?
Partamos con los datos técnicos. Bubis Vayins es una agrupación oriunda de Rosario, Argentina que se mueve entre los senderos del postpunk y el rock alternativo.
Lo notamos casi al instantes en las guitarras, caja, bajo y voz, por la evocación juvenil que este estilo nos trae. Eso sí, la inclusión de los sinterizadores es un movimiento tan acertado que define, compacta y realza lo que esta banda tiene para ofrecer.
Salir al ruedo con un primer disco no resulta fácil. Siempre veo algo en la oscuridad nos termina hablando en líneas generales de las inquietudes de una generación, así como también de sus aportes e ideas.
Este primer trabajo es un cachetón. Es un «siéntate y escucha» lo que os tengo que decir, y está de más resaltar que la marea que viene después es imparable. Hay un ímpetu sincero que hace que esta placa discográfica pueda reproducirse una y otra vez sin llegar a cansar.
Como es característico del género, el uso de atmósferas, flangers y reverb saldrá a relucir desde el primer momento. Suena a garage, a casa, a hogar, a uñas. Los trabajos de mezcla son balanceados, puntuales y concisos.
Bubis Vayins se vale de recursos simples que se sostienen a la creatividad de composición. El track que da nombre al disco contiene líneas de bajos potentes, acompañadas de coros y trabajos vocales a gañote, progresiones de acordes de quintas y puñaladas de sintes. Muchos de estos recursos los veremos reflejados a lo largo y ancho de las pistas siguientes.
Un detalle encantador es el coqueteo con el postrock, de ese que recuerda mucho a MaybeSheWill. Se siente en su mayoría como un poema. Algunos podrían catalogar el trabajo lírico como irreverente, pero en lo personal me gusta observarlo como una fuente, un catalizador de complementos que crece y crece hasta diluirse en los beats a cuatro tiempos de la bateria.
Siempre veo algo en la oscuridad es un disco orgánico, parecido a una cadena o a un conjunto de senderos que llevan a diferentes diatribas, preguntas e inquietudes. Encierra mensajes, códigos, en sus muchos pasajes que, el oyente, deberá encargarse de darles sentido.
Bubis Vayins nos trae crítica y reflexión; los sonidos de la juventud, de una nueva generación que combate, muy a su manera, las cargas del mundo moderno. En esencia, la banda conserva y mantiene vivo ese espíritu de mirar a la cara a lo que está mal, sin dejar de observarse a sí misma en la búsqueda por la identidad, por su propósito.
«Estoy gritando y bailando alrededor de tus llamas».